Cuántas veces hemos pensado en recorrer esas carreteras que en coche pasan desapercibidas y en moto son de ensueño?.

Como por arte de magia teníamos en nuestras manos la oportunidad de conocer los rincones de una gran sierra, cuna del río Guadalquivir, frontera en tiempos de reconquista cristiana con decenas de castillos templarios, y reserva natural con innumerables especies animales y vegetales. Donde aún quedan muflones y ciervos, buitres leonados y búhos reales. Donde el agua de sus pantanos se vuelve color esmeralda con el reflejo del sol. CAZORLA. 

Esta aventura la emprenden seis aventureros en tres motos José Ramón y Reyes ( BMW R1200RT), Rober y Almudena (BMW R1200 GS) y Pablo y Natalia (SUZUKI GSX 650 F). Cargados como corresponde iniciamos camino un viernes 11 de septiembre a las 3:30 PM.

Nos dirigimos por M-30 hacia A-4 con ligero aire caliente por la densidad de tráfico de camiones. Las rectas de esta autovía son bien largas, así que en poco tiempo paramos a estirar las piernas, tomar un refresco y repostar en el Hotel El Cruce en Manzanares km. 173. 

Tras pasar el puerto de Despeñaperros en un abrir y cerrar de ojos finalizamos los tramos de rectas interminables y nos desviamos en el km. 266 Vilches-Úbeda. El paisaje cambia de raíz a un terreno cobrizo y con las primeras hileras de olivos de la provincia de Jaén. Atravesaremos tres embalses: La Fernandina, Guadalén y Giribaile. 

Enlazamos con A-32 dirección Albacete y a pocos kilómetros desviamos a la derecha por A-315 Cazorla-Quesda , recientemente recorrido por la Vuelta Ciclista. En la entrada al pueblo Peal de Becerro haremos una parada en la Cooperativa Virgen de la Encarnación, una de las más importantes aceiteras de la comarca, a estirar músculos y enlazar por teléfono un lugar donde cenar, que será Quesada. Llegamos a la cuna del pintor Rafael Zabaleta, ya de noche y vamos directos al restaurante "El Curioso". Buenas viandas y cobertura de teléfono son nuestro objetivo inmediato, para retomar después el último tramo con una oscuridad como la boca de un lobo. salimos por A-6206 dirección Tíscar por una sinuosa carretera plagada de curvas, algo estrecho y con precipicios, tentador.

Tras pasar el puerto a 1183 metros y tras 14 kilómetos llegamos a nuestro destino en una finca particular frente al Hotel Rural "El Vadillo". Y tomando posesión del lugar celebramos nuestra llegada con un Cóktel Party a este valle fronterizo custodiado por la Virgen de Tiscar, de las más antiguas de España ya que fue traída por San Isicio, discípulo del Apóstol Santiago.



Ya es sábado y una nueva e interesante jornada nos espera. Tras desayunar en el restaurante "El Vadillo" muy amablemente atendidos por su dueño Marcelino, comenzamos un recorrido espectacular con temperatura otoñal, suelo seco y sol. ¿Qué más se puede pedir?.


Salimos Dirección Quesada ahora viendo el paisaje que nos perdimos anoche, apabullante. Po la A-315 a pocos kilómetros nos desviamos hacia Cazorla por A-322 y enlazando con A-319 llegamos a esta villa todo con empinadas cuestas. Atravesamos población para visitar el Castillo de la Yedra, el edificio más emblemático que data del siglo XI, con Torre del Homenaje y mazmorras con leyenda como la de la "Tragantía", una criatura fabulosa que aparece en la noche de San Juan.








Salimos de la población por las estrechísimas calles, en dirección La Iruela, bordeando un castillo templario. La fortaleza se asienta en un roquedal frente a las abruptas cumbres de la Sierra de Cazorla. De origen musulmán y reforzada por los templarios fue de gran importancia militar.





Empinadas y cerradas curvas nos llevan hasta el Puerto de las Palomas con un escalofriante y vertiginoso mirador. Bordeando el Pantano del Tranco por su cara Norte haremos una parada en el Mirador de Félix Rodríguez de la Fuente, desde donde tendremos una panorámica del embalse del Tranco y de la isla Cabeza de la Viña donde se encuentra el Castillo de Bujaraiza, pequeña fortaleza del siglo XII ahora inaccesible por la construcción de modernas presas. Y es aquí, frente a estas tranquilas aguas, donde pararemos a comer ricas raciones del lugar, chorizo de jabalí, secreto ibérico... 





Continuamos dirección Hornos A-317, también con castillo de origen musulmán y reconstrucción cristiana desde el siglo XII, una de las más recias y fuertes de toda la sierra. Con un excelente asfalto y sin nada de tráfico seguimos dirección Pontones. Aquí se encuentra un yacimiento arqueológico llamado Cueva del Nacimiento donde se encontraron restos datados en el 9250 a.C.



Más adelante en nuestro trayecto llegamos a Santiago de la Espada. Parada en una de las escasas gasolineras. Curvas y más curvas nos llevan hasta Puebla de don Fadrique en la provincia de Granada y cuyo nombre viene de la época de la reconquista por los Reyes Católicos estando al mando de la frontera Don Fadrique Álvarez de Toledo, II Duque de Alba.





Tomamos la A-330 Huéscar y luego tomaremos la A-326 Castril-Pozo Alcón. A partir de aquí bordearemos la vertiente sur de la sierra, ya dirección Tíscar pasando por el Pantano de la Bolera. 

Llegamos a Pozo Alcón y cogemos un pequeño trozo de la A-315 para desviarnos dirección Quesada por A-6206 hacia nuestro punto de descanso, Tíscar, que significa "Paso entre Montañas" en lengua bereber "Hins Tiskar". El último tramo lo realizamos en la más absoluta oscuridad, sólo iluminados por las luces de nuestras motos y divisando algún zorro serrano. 

Cenaremos con ropa de Civil y haremos la gran "Fiesta de Cierre de Ruta", recordando paisajes, castillos, miradores... El Domingo, tras un buen desayuno en "El Vadillo" visitamos la Cueva del Agua. Cuenta la tradición que en tiempos de reconquista fronteriza, como represalia a la cristiandad, la virgen fue arrojada al río Vadillo, pero milagrosamente al día siguiente apareció en su lugar sin daño alguno. 

De aquí subiremos hasta el Santuario de la Virgen de Tíscar y desde la explanada de éste veremos la Torre del Homenaje del Castillo conquistado por Fernando IV y la ayuda de las órdenes militares de Alcántara y Calatrava la cual por falta de más tiempo visitaremos en otra ocasión. Decidimos comer algo ligero para el viaje de vuelta y despedirnos de este singular paraje que sin duda ha dejado una imborrable huella.








Con mucho pesar haremos camino de vuelta haciendo el camino del viernes a la inversa. 

Saludos Moteros

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