Ruta de los "Badenes"

El pasado día 22 de Diciembre, aprovechando que la profecía Maya, había errado en su pronóstico,y todavía seguía vivo, decidí para celebrarlo, acudir a la llamada de Moteros de la Safa que proponían una ruta, que si en un principio, no parecía muy atractiva por la escasez de curvas (alimento del que como todos saben se nutre el motero) si lo era por la posibilidad de visitar, o al menos ver, tres castillos repartidos por el recorrido. Consultado el oráculo del Meteosat, este contestó que: “Temperaturas agradables y tiempo soleado”, lo primero resultó cierto, lo segundo... no y así, a las diez de la mañana (“¡¡por fin una hora decente¡¡”) nos dimos cita en la esquina del colegio.

Saludos entre los congregados y primera incidencia José Ramón en una extraña maniobra rompe el caballete de su BMW, y tiene que buscar un taller de emergencia para repararlo, decidimos que se nos uniría mas adelante una vez solucionado, y así partimos; envueltos en la densa niebla por la carretera de Extremadura camino de El Álamo (no el de la película de Jhon Wayne, otro) recogiendo por el camino a dos compañeros, en total unas quince motos más o menos.

Tráfico denso y la incomodidad de la niebla nos acompañan en el trayecto donde perdemos algunas unidades que paran a repostar y que luego se nos unen. LLegados a El Álamo, "tournée" por los badenes del pueblo visitando todos y cada uno de ellos buscando la salida hacia Batres. reconociendo que estamos despistados, Roberto pregunta a un paisano por el camino correcto el cual, después de prolijas explicaciones, y accionar los brazos en diferentes direcciones, nos indica el camino que nos lleva a recorrer otra vez todos los badenes, y a perdernos de nuevo. 

Definitivamente hemos preguntado al “tonto del pueblo” (ese gorro de lana debió hacernos sospechar) pero como no hay mal que cien años dure, por fin salimos y casi inmediatamente llegamos a Batres, (a partir de este momento pasaremos a llamar a esta ruta la “Ruta de los Badenes”), una vez reunidos, descabalgamos y nos dedicamos a comentar lo bonito del trazado recorrido y lo agradable de la niebla mientras nos dirigimos hacia el primero de los castillos que jalonan la ruta, bueno, en realidad el primero y el último por que no vimos más y aún este, nos lo imaginamos entre la niebla ya que estaba cerrado y no pudimos visitarlo.

Risas alborozadas comentando nuestra desdicha y... de nuevo a la carretera en busca de nuestro siguiente destino,a partir de este momento la ruta pasa a llamarse “Ruta de los Arcenes” ya que nuevamente desorientados, paramos cada 150 metros en el mejor de los casos, para reubicarnos y consultar a los astros, el GPS... yo incluso pensé en ofrecer un sacrificio humano que fuese agradable a los dioses de la niebla, tal vez Roberto, que por su tamaño tiene más que comer que un servidor, pero no fue necesario; apareció José Ramón que por lo visto era el único que sabia donde íbamos  y reconfortados en el ánimo nos dirigimos a Novés al Custom Bar, donde nos aguardaban las cervecitas y las patatas con salsa de las que dimos buena cuenta entre conversaciones de “altura”; que si esa moto es una porquería, que si la otra es mejor, que si aquella es peor, que si yo en los circuitos hago esto y aquello...en fin lo de siempre; “fanfarronear”.

Como se nos había hecho tarde,nos despedimos deseándonos feliz Navidad,y pusimos proa hacia Madrid donde siempre a cruceros legales llegamos quince minutos después, otros diez más por la M40, y escuchaba la melodiosa voz de mi señora diciéndome: “Queee tarde” ...¡¡Feliz Navidad a todos los moteros de buena voluntad!!. Queche

Ver mapa más grande